LIBROS
¡TETAZAS!
Ir a Taschen es como visitar una fábrica de golosinas de crío y con el ticket dorado de Charlie Wonka. Un auténtico festín de los mejores libros del planeta, editados con un lujo nada hortera sino exquisito y auténticamente bibliófilo. Incluso se perdona el maremótico atasco del mediodía en Gran Vía si te recibe en el showroom el colosal volumen sobre Classius Clay abierto de par en par (la edición superespecial creo que vale... 10.000 dólares). Esta mañana me he pasado para recoger un par de tomos que María me tenía reservados: uno, el fantástico libro sobre "Babel", el último filme de Íñárritu. Otro, tachán, "The great book of breast", una auténtica sobredosis mamaria donde desfilan los mejores senos de la historia, desde Jayne Mansfield a las chicas neumáticas de Russ Meyer (tú no estás, Yola. Sorry). Tremendo y casi obsceno para la vista. Pero nada grotesco, un adjetivo que nunca se aplicará a Taschen, por muchas osadías que edite. En fin, una lectura de lo más recomendable, sobre todo para un día mustio como hoy.